Y te preguntaron si estabas bien, si después de esa caída, de ese tropezón, no estabas lastimada. y...¿que pregunta tan idiota verdad? ¿como podes estar bien después de todo lo que pasó? pero en fin, respondes con un "sí", un "si" camuflado, con ese nudo en la garganta que te avisa siempre que vas a llorar, ese nudo que te angustia. ¿Quien merece conocerte en verdad? ¿Quien merece saber porque estas mal? ¿Quien merece saber que hay dentro de ti? Si nadie se esfuerza por valorarte y vos tampoco te valoras, ¿que queda de tu vida?